¿Por qué no hay suficientes famosas latinas que abracen la soltería?

En el dinámico panorama de Hollywood -donde las narrativas en torno al romance y las relaciones siguen evolucionando- sigue habiendo un vacío cuando se trata de la soltería. Aunque destacadas figuras femeninas como Mindy Kaling, Jennifer Aniston y Tracee Ellis Ross han abrazado con orgullo sus trayectorias en solitario, las famosas latinas no se hacen oír tanto. En una cultura en la que las relaciones suelen ocupar un lugar central y ser una mujer soltera se percibe a menudo como un fracaso social, explorar las razones subyacentes a esta disparidad es esencial mientras seguimos abogando por una representación más diversa.

Varias estrellas notables de Hollywood, incluidos iconos como Drew Barrymore, Linda Evangelista y Diane Keaton, se han manifestado abiertamente y sin pedir disculpas sobre su soltería, al tiempo que han allanado el camino para una visión más aceptable de la soltería. Pero los focos sobre las famosas latinas siguen estando relativamente apagados. La superestrella latina Jennifer López, que se define a sí misma como una romántica empedernida, ha pasado de una relación seria a otra a lo largo de toda su carrera. Recientemente, a la cantante española Rosalía se la relacionó sentimentalmente con el actor Jeremy Allen White poco después de su ruptura con su anterior prometido, Rauw Alejandro.

Aunque sus elecciones personales son suyas, no podemos evitar preguntarnos hasta qué punto las presiones culturales pueden haber influido en la falta de celebrities latinas que parezcan abrazar la soltería.

Aunque Bad Bunny insiste en que no tiene prisa por sentar la cabeza -e incluso ha creado hábilmente una canción titulada «No me quiero casar» para su último álbum, «Nadie sabe lo que va a pasar mañana»-, no vemos que las latinas abracen plenamente la soltería.

Una excepción actual a esta tendencia parece ser Shakira, conocida mundialmente por su música y sus carismáticos movimientos de baile. Aunque el estado de soltería de Shakira es evidente, rara vez lo aborda abiertamente en entrevistas, en las redes sociales o en su música. Shakira sí se aventuró en un tema disidente con «Bzrp Music Sessions, Vol. 53», pero cabe destacar que desde el éxito del tema, su exploración musical aún no ha profundizado en el tema de la soltería y la navegación por este nuevo capítulo de su vida.

En muchas culturas latinas, existe la expectativa implícita de que las mujeres deben dar prioridad a la vida familiar, casarse, tener hijos y ajustarse a las estructuras tradicionales de las relaciones.

Esta reticencia a aceptar y celebrar la soltería plantea interrogantes sobre los factores culturales que pueden contribuir a la disparidad en la representación. Las normas culturales imperantes en la comunidad latina desempeñan un papel importante en la configuración de las actitudes hacia la soltería. En muchas culturas latinas, existe la expectativa implícita de que las mujeres deben dar prioridad a la vida familiar, casarse, tener hijos y ajustarse a las estructuras tradicionales de las relaciones. La presión social para encontrar pareja mientras aún se es «fértil» y formar una familia puede perpetuar inadvertidamente el estigma asociado a la soltería.

Ser soltera suele malinterpretarse como algo indeseable o indicativo de fracaso personal, lo que perpetúa los estereotipos dañinos de que las mujeres solteras son «mercancía dañada» o lo que en la cultura latina se suele denominar una «jamona». Esto fomenta entonces un entorno en el que las latinas pueden sentirse obligadas a dar prioridad a las relaciones, aunque ello signifique comprometer su individualidad o su felicidad personal.

Estar soltera suele malinterpretarse como algo indeseable o indicativo de fracaso personal, lo que perpetúa los estereotipos dañinos de que las mujeres solteras son «mercancía dañada» o lo que en la cultura latina se suele denominar una «jamona».

La falta de celebridades latinas que abracen la soltería envía el mensaje de que las vidas exitosas y realizadas se logran principalmente a través de las relaciones románticas, una narrativa que no sólo no reconoce los diversos caminos hacia la felicidad y la realización, sino que también refuerza la noción de que la valía de una mujer está ligada a su estado sentimental.

Mientras que la cultura latina presiona a las mujeres para que mantengan relaciones comprometidas, parece haber un descuido crítico con respecto a los cambios significativos en el panorama de las citas. Las aplicaciones de citas se han convertido en una forma popular de conocer a posibles parejas, pero es esencial reconocer que muchas mujeres solteras de hoy en día eligen conscientemente la soltería antes que conformarse con una relación que realmente no les sirve. La anticuada noción de que debemos entrar en una relación comprometida por el mero hecho de estar en una o para cumplir los objetivos tradicionales del matrimonio y la maternidad ha evolucionado. Las investigaciones indican que, por término medio, las mujeres tienden a experimentar una mayor felicidad cuando deciden no casarse ni tener hijos, lo que desafía las expectativas convencionales y pone de relieve las diversas vías de realización de las mujeres. Hoy en día, las mujeres tienen el poder de priorizar su felicidad y su crecimiento personal por encima de las expectativas de la sociedad, desafiando la narrativa que antaño dictaba el propósito principal de la implicación romántica de una mujer.

Pero sólo algunas celebridades lo están reflejando al público. Ha sido realmente refrescante ver a Sofía Vergara abrazar su recién descubierta soltería tras divorciarse del actor Joe Manganiello después de siete años de matrimonio.

Al igual que Vergara, debemos empezar por normalizar la soltería en nuestras comunidades, haciendo hincapié en su importancia tanto para los hombres como para las mujeres. Es crucial transmitir a las jóvenes y a las mujeres que su valía no está únicamente ligada a sus relaciones románticas. Debemos animarlas a dar prioridad al crecimiento personal y al cuidado de sí mismas antes de entrar en relaciones comprometidas que pueden no servirles. Introducir diversas estructuras de relación más allá de los roles tradicionales es clave; tenemos que eliminar los juicios sobre el estado sentimental y la edad de las mujeres. Es hora de cambiar la narrativa, fomentando conversaciones abiertas que desafíen los estereotipos y capaciten a las mujeres para definir sus caminos. Al hacerlo, es crucial abordar el vacío de mujeres latinas destacadas que abracen la soltería y promover un diálogo más inclusivo que refleje las diversas experiencias y elecciones dentro de la comunidad.

Fuente de la imagen: Getty / Presley Ann Marc Piasecki Daniele Venturelli Rodin Eckenroth y Photo Ilustration: Keila Gonzalez